miércoles, 29 de julio de 2015

Me apunto a la lucha ciudadana y política europea


 
 
Nunca fuí partidario de las teorías de la conspiración de las élites globales iluministas organizadas y ocultas. Sin embargo el proceso de apropiación capitalista a costa de la política y la sociedad toma forma de estado de sitio total y alarmante. Seguimos con nuestra miserable vida de idiocia aburguesada mientras nuestros estados nos están vendiendo lo común a pedacitos. Afirmo con absoluta seguridad de lo que digo que la lucha es global, el campo de batalla es global y que no podemos seguir parapetados únicamente en instituciones locales pensando que así tendremos protección y, menos, empoderamiento. O salimos a campo abierto las multitudes hasta acorralar a los mercaderes o ellos nos acosarán hasta que seamos esclavos. Si Varoufakis funda un partido de alcance europeo, yo me apunto.

domingo, 26 de julio de 2015

Marchemos sobre Bruselas







Plataforma catalana EuroMarxes 2015


Hace años comprendimos lo que significaba la construcción europea a través de sus tratados, un proyecto del capital europeo para crecer en competitividad a costa de la mano de obra y de la ciudadanía en general. Sin embargo ha tenido que producirse un cambio de la economía principalmente productiva a la economía financiarizada y una crisis financiera y sistémica para que una gran parte de personas en la Unión Europea hayan tenido que comprobar en su propia vida hasta donde llega la tiranía del capital.

Después de que los estados han salvado a los bancos mediante el erario público, convirtiéndose la deuda privada en deuda pública, estos mismos bancos con el dinero del rescate y los préstamos sin apenas interés del BCE, se convirtieron, junto al Banco Central Europeo, en los grandes compradores de deuda soberana. El compromiso de pago que los gobiernos adquieren con los diversos acreedores, ha significado en diversos países un mecanismo de esclavitud a través de la deuda. La Comisión Europea, el FMI y el BCE (Troika) han impuesto las eufemísticamente llamadas “reformas estructurales” unas políticas de austeridad y recortes sociales a los pueblos, que están generando alarma social, paro, precariedad, pobreza y desigualdad insoportables. 

De entre todas las políticas antisociales, el pueblo griego es, desde 2010, el más dramáticamente tiranizado mediante la trampa de la deuda. Somos muchas personas en Europa que nos sentimos solidarios con el pueblo griego, sensibles ante el oprobio y el dolor que este pueblo valiente viene padeciendo.

Y mientras esto sucede los negociadores institucionales y lobistas de la Unión Europea y de Estados Unidos, de forma totalmente opaca, están entregando el control de la democracia, las normativas laborales, el medio ambiente, la alimentación, las patentes, los bienes, servicios y prestaciones públicas - como la salud, la educación o las pensiones – en manos de las élites económicas. Ello mediante los acuerdos de comercio e inversiones que se están estableciendo con las negociaciones del TTIP o el TISA.

Pero también está teniendo lugar un gran atraco a la ciudadanía europea por medio de los paraísos fiscales, mediante la elusión, evasión, fraude fiscal y blanqueo de capitales que vehiculan el producto de la rapiña, la corrupción o la criminalidad de esas mismas élites y delincuentes de toda calaña.

Y la idea de una Europa unida languidece mediante la realidad de la competencia interna y la insolidaridad entre sus países miembros. Se toman al mismo tiempo a nivel europeo crueles medidas insolidarias para contener la emigración, medidas que están legitimando en una parte de la ciudadanía actitudes o discursos xenófobos o racistas.

Esta no es la Europa que las fuerzas populares que lucharon contra el fascismo soñaron tras la Segunda Guerra Mundial, no es una Europa habitable, amable, igualitaria, solidaria. Las élites económicas y sus vasallos políticos, la están convirtiendo en un continente inhóspito, tiranizado por el poder del dinero y que se erige como fortaleza infranqueable ante el sufrimiento y desesperanza del Sur.

Son muchas las personas sin futuro o directamente esclavizadas o excluidas por esta Europa de los mercaderes que se afianza también depredando el territorio y el medio ambiente. Y hemos decidido decir basta a la tiranía del dinero, que ha raptado los instrumentos propios de la soberanía popular.

Igual que el despotismo continuo del Señor feudal provocaba la ira y la rebelión popular en la Edad Media, la humillación y empobrecimiento del pueblo griego ha sido la chispa que ha impelido a diversas fuerzas políticas y sindicales populares y movimientos sociales a proponer como medida urgente en el seno de la Cumbre alternativa europea (Alter Summit)  programar una acción urgente a nivel de ciudadanía. Cuando los gobiernos han rendido sus armas al capital, los ciudadanos habremos de rebelarnos contra esta Europa tiránica.

Se viene planificando desde marzo de 2015 una acción coordinada a nivel europeo. En ella se propone que se formen diversas columnas de ciudadanos y ciudadanas que confluyan hacia Bruselas entre los días 1 y 17 de octubre de 2015.

LA REBELIÓN DE LA MAYORÍA CONTRA LA ÉLITE TIRÁNICA ES NECESARIA ¡MARCHEMOS SOBRE BRUSELAS!

domingo, 19 de julio de 2015

Llamamiento EuroMarchas 2015





Por una Europa de las personas, digamos ¡basta! a la Europa del capital


Cada vez más personas, ciudadanas de la llamada Unión Europea, acaban el día habiendo perdido el trabajo o viendo cuestionados y mermados los derechos a una vivienda y una salud digna, una educación igualadora o unas pensiones suficientes. La llamada crisis financiera ha sido la excusa perfecta del capitalismo globalizado para reducir al mínimo los derechos ciudadanos y desposeer a los pueblos de su soberanía democrática.

Sabemos reconocer al opresor, el poder tiránico de los muy ricos y sus grandes empresas y negocios financieros del capitalismo, hoy global; pero también hemos aprendido a conocer y desenmascarar a sus lacayos, políticos que se eligieron para servir al pueblo y sin embargo sirven al poder del dinero. Han pactado antidemocráticamente las normativas europeas con el capital y no con los pueblos. Y hoy esos mismos grupos políticos popular, “socialista” o liberal de la UE siguen mintiéndonos para conseguir nuestro voto, mientras siguen aprobando medidas antisociales en la Unión Europea o en sus gobiernos territoriales.

• Cuando nuestros representantes han supeditado la democracia a la codicia de los mercados, habremos de decir ¡basta!
• Cuando la Troika nos está ahogando con una deuda soberana ilegal, ilegítima, odiosa e insostenible que en su origen era de los bancos, priorizando su pago a cualquier gasto social, llegando a sumir a pueblos, como el griego, en la esclavitud por medio de esta deuda, habremos de decir ¡basta!
• Cuando a los países del sur de Europa se nos ha negado, mediante la Europa monetaria y el pacto del Euro, la posibilidad de poder realizar políticas autónomas para combatir el insoportable nivel de paro y salir de la crisis, habremos de decir ¡basta!
• Cuando una mayoría de parlamentarios europeos han votado una resolución para formalizar el tratado entre Estados Unidos y la Unión Europea, el TTIP (Acuerdo Transatlántico para el Comercio y la Inversión) por el que las empresas gobernarán pudiendo llevar a los gobiernos ante tribunales antidemocráticos cuando estos quieran promover medidas para mejorar las condiciones de vida de la gente o del medio ambiente habrá que decir ¡basta!
• Cuando en Europa existen territorios paraísos fiscales, que poseen secreto bancario, baja fiscalidad y otras normas en beneficio de las personas ricas, grandes capitales y empresas. Y son plataformas para la elusión, evasión y fraude fiscal, para los negocios turbios, la especulación financiera o el lavado del dinero de los corruptos y de la criminalidad organizada, habremos de decir ¡basta!
• Cuando nuestro medio ambiente, bosques, atmósfera, ríos y mares se deterioran hasta extremos alarmantes sin que haya ninguna planificación eficiente para mejorarlo, ni se cumplan los mínimos acuerdos y medidas que se estipulan en las cumbres internacionales, habrá que decir ¡basta!
• Cuando no se desarrollan políticas de igualdad real de género y la mujer sigue sufriendo la desigualdad y marginación en una sociedad de hecho patriarcal. Cuando el machismo y las agresiones contra la mujer siguen siendo noticias cotidianas en la prensa, Habremos de decir ¡basta!
• Cuando mediante la Directiva de la emigración o de la vergüenza, se levantan muros físicos y legales a las personas cuando huyen de guerras, miseria o enfermedades, buscando un futuro en nuestro continente. Cuando estas políticas son el posible germen de una sociedad europea racista, xenófoba o insolidaria, habrá que decir ¡basta!
• Cuando esta Europa somete el bienestar social a los interesas del mercado, privatiza los servicios públicos, desampara a su ciudadanía más frágil, vulnerable y necesitada; recorta la financiación limitando el acceso a la vivienda, los suministros de agua y luz, la salud, la sanidad, la educación y los servicios y prestaciones sociales y universales, habrá que decir ¡basta!

La tan deseada Europa, democrática, igualitaria, social y políticamente unida y en paz; aquella que soñaron tras la Segunda Gran Guerra los partisanos supervivientes, los movimientos políticos y sindicales de la izquierda; se fue construyendo bajo el tutelaje de los Estados Unidos de América y del capital europeo y hace tiempo fracasó. El momento actual para la ciudadanía y los pueblos de Europa es desesperante.

Está claro que estamos en un momento de emergencia social y cívica. Uno de esos momentos en que el pueblo necesariamente ha de levantarse contra la tiranía si no quiere vivir como esclavo el resto de su vida. La libertad, ese gran valor de la democracia, es demasiado preciosa como para dejarla en manos de los mercados y los políticos a su servicio. Nadie es libre si no puede decidir sobre su vida y ha de vender su fuerza de trabajo en condiciones próximas a la esclavitud para poder conseguir lo necesario.

Los gobiernos hace tiempo que rindieron sus armas al capital y los medios de comunicación divulgan y aplauden sus crueles políticas. Ha llegado la hora de que la ciudadanía asuma su papel histórico de rebelión contra la tiranía de los pocos. Unión Europea sí, pero otra unión al servicio de las personas, no del capital.

Las fuerzas políticas y sociales populares tienen hoy un deber ineludible, el de promover la movilización en Europa. Así mismo la ciudadanía europea tiene el reto de diluir fronteras y confraternizar en una lucha común, asumiendo que ha de comenzar a tejer los lazos tan necesarios entre los pueblos, que vuelvan a revivir el sueño europeo de post-Guerra. Por esto diversos movimientos sociales y organizaciones políticas y sindicales hemos planificado una acción conjunta de los pueblos de Europa, las EUROMARCHAS 2015. Entre los días 1 y 17 de octubre de 2015 los pueblos de Europa se movilizan hacia Bruselas para pedir un giro radical en las políticas de la Unión Europea.

En el Estado Español junto al resto de los estados miembros de la Unión Europea nos estamos organizando para los actos de estos días, os invitamos a las personas y entidades a participar.

Para más información: 
Cataluña: https://plataformamarxaabrusselles.wordpress.com/ 
Estado Español: http://euromarchas2015.net/

Por la unión de la ciudadanía europea, Contra la Europa del capital y por una Europa de las personas, democrática, social, ambiental y solidaria

Participa en las EUROMARCHAS 2015
Gibraltar – Bruselas del 01 al 17 de octubre



“¡Oxi! ¡Basta! ¡Enough! Construyamos otra Europa”